7 AÑOS EN LA WEB MUNICIPAL

Por Marina Aoiz Monreal, periodista y escritora.

A lo largo de las fiestas varias personas me han preguntado por qué no informaba de los acontecimientos festivos a través de la página web www.tafalla.es como lo he hecho durante varios años. Esas personas y probablemente muchas más, desconocen que la alcaldesa señora Sota, me despidió del trabajo como editora y responsable de la página web el pasado mes de mayo. Desde mayo de 2005 hasta el mismo mes de 2012, fui la autora de artículos, reseñas, reportajes y cuanta información periodística literaria y gráfica, se editó en la página web municipal. Me consta que el trabajo, al tener presentes a todos los colectivos de la ciudad, resultó del agrado de la ciudadanía, pero es evidente que no complació a quienes ejercen el poder. Ya se sabe que una de las vertientes de la corrupción política es la toma de decisiones arbitrarias y mi despido ha sido una de ellas.

Para dejarme sin el trabajo que he realizado con esmero, superando en número de horas y dedicación la retribución económica que recibía por ello, se me argumentaron cuestiones tan espurias como que “la página web no vende Tafalla” o que “por qué tenía que informar sobre los plenos”. El objetivo de una periodista no es vender la ciudad (sería vergonzoso) y la página web es un servicio municipal que debe ofrecer información a la ciudadanía y no convertirse en vehículo de propaganda de un partido político. Mi percepción ante el despido es que la señora Sota y su grupo municipal, además del poder, ostentan el miedo atávico a la información. Ya se sabe que de Franco a Stalin, la censura ha sido uno de los recursos empleados para evitar que la ciudadanía reciba la información que le permita generar su propia opinión.

Considero el trato recibido por parte de la señora Sota absolutamente indigno. La alcaldesa no ha mostrado ni el mínimo gesto de gratitud ni la menor empatía, consciente de que he ejercido la actividad periodística durante siete años en condiciones precarias y que me quedo en la calle sin ningún tipo de indemnización económica ni derecho al subsidio de desempleo. 

Agradezco sinceramente la relación establecida con todos los colectivos culturales, musicales, sociales, deportivos, etcétera, que mantienen viva nuestra ciudad, así como la labor de las y los empleados municipales que puntualmente proporcionaron información para la web. Me reafirmo en la creencia en las personas que con amor, ilusión, esfuerzo y voluntad ejercen tanto el trabajo cotidiano como las múltiples maneras de expresar la belleza, la solidaridad y la libertad. Las personas “de a pie”, las que merecen respeto y sin ninguna duda tienen todo el derecho a estar informadas.